lunes, 9 de marzo de 2009

Jubilaciones de lujo a costa de los contribuyentes

Economía, jubilaciones, lujo, contribuyentes

@A. I. Gracia - 07/03/2009 06:00h

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Los despidos multitudinarios son el pan nuestro de cada día y tampoco se han salvado de la quema grandes ejecutivos que parecían completamente a salvo. Pero hay quienes se pasean ajenos por el barrizal levantado por la crisis. Esta historia no va con ellos. Si las cuentas de las compañías hablasen, se quejarían del constante chorreo de dinero que reciben ex consejeros delegados que viven, porque así lo firmaron, una jubilación de lujo, desenfreno y derroche a costa de los bancos para los que trabajaban, todos ellos rescatados por el Gobierno estadounidense y un dinero que pagan todos los ciudadanos como contribuyentes.



Algunas compañías han llegado a desaparecer; otras están entre el suicidio y la muerte; incluso todavía existe más de una a las que la crisis asfixia pero no ahoga. Sin embargo, lo acordado va a misa. Portfolio.com describe los honorarios que le permiten a nueve ex directivos vivir con todo lujo de detalles gracias al contrato de despedida que firmaron con su compañía. No se sabe cómo, pero muchas empresas siguen pagando los aviones privados, los coches de empresa y hasta las secretarias a demasiados ex dirigentes que ya no están a los mandos de las compañías.



Edward E. Crutchfield, ex presidente y consejero delegado del banco estadounidense Wachovia, recibió 1,8 millones de dólares (1,4 millones de euros) para poder disfrutar de un “especial retiro” hasta el resto de sus días. Por si no fuera suficiente, el acuerdo también le concedía el derecho de contar con una oficina propia (incluida secretaria personal), así como del avión corporativo durante los diez primeros años de la jubilación, aunque fuentes de la entidad revelaron que Crutchfield dejó el avión corporativo hace ya cinco años.



Tras la salida de Crutchfield subió a la presidencia del banco G.Kennedy. Fue sacado a la fuerza del Consejo en junio del año pasado. Eso sí: continuará teniendo acceso a una oficina y a un asistente personal hasta junio de 2011. Incluso después de que Wells Fargo se hiciera con Wachovia, fuentes de la compañía confirman que el acuerdo sigue en pie incluso después del cambio de mandos en Wachovia.



David Sambol es ex director de operaciones de Countrywide Financial, la compañía hipotecaria número uno de EEUU. Se le concedió 20 millones de dólares del Bank of America cuando adquirió la hipoteca de la entidad crediticia en enero de 2008. Recibió la mitad del dinero cuando se cumplió el primer aniversario de la firma del acuerdo. Fuentes de Bank of America no declararon si los diez millones restantes se pagaron o no. Lo que sí se sabe es que Sambol tenía derecho a un avión corporativo, un coche de compañía, y servicios de orientación financiera hasta finales de 2009.



Bank of America compró el banco de inversión Merrill Lynch en septiembre por cerca de 44.000 millones de dólares, algo más de 30.500 millones de euros. Fue entonces cuando Bank of America se hizo cargo de la jubilación que firmó E. Stanley O´Neal, ex presidente y consejero delegado de Merrill Lynch: su oficina en Manhattan y el salario de su asistente hasta octubre de 2010.



Otro coste que se sumó a las arcas de Bank of America fue la jubilación Charles K.Gifford, ex consejero delegado de Fleet Bank. Hace cuatro años, el banco le proporcionó un avión corporativo. Y eso que ya contaba con una oficina en Boston y una secretaria personal.



Charles O. Prince, ex presidente y consejero delegado de Citigroup, firmó recibir, hasta noviembre de 2012, servicios de secretariado, una oficina y otros beneficios que le llegan desde el banco estadounidense. La misma compañía aguanta los costes de jubilación de John S. Reed, otro ex consejero delegado. Cuando firmó el acuerdo de salir del banco en julio de 2000, la empresa también le puso una oficina con secretaria incluida, un coche con conductor (también incluido) el tiempo que le fuera necesario. Incluso, cuando Reed salió del área de Nueva York, Citigroup le buscó una oficina con secretaria hasta la vuelta.



William B. Harrison Jr renunció a su puesto de consejero delegado de JP Morgan Chase en diciembre de 2005 y como presidente un año después. Harrison, de 65 años, cuenta con una oficina y soporte administrativo hasta los 70.



El ex presidente ejecutivo del North Fork Bank John A. Kanas recogió 212 millones de dólares cuando vendió Norht Fork Bancorp a Capital One en marzo de 2006. Año y medio después abandonó Capital One, pero no se fue sin antes firmar que podía seguir accediendo a la suite de la oficina en Long Island. En el acuerdo firmado, Capital One dijo que la oficina de Long Island sería construida fuera de las especificaciones del ejecutivo. Capital One también proporciona a Kanas con un asistente administrativo y un vehículo con chófer hasta finales de este año.

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